Con tantos productos de software de preparación de impuestos en el mercado, puede ser un desafío saber cuál es el mejor para usted. Algunas herramientas son mejores que otras. Un profesional fiscal independiente o el propietario de una pequeña empresa pueden ser más adecuados para un software de preparación de impuestos diferente que un contador público certificado que trabaje en una gran empresa corporativa.

Como cualquier producto que comprarías, lo primero que debes considerar es tu presupuesto. Un plan premium puede ofrecer más funciones y formularios, pero puede que no sea la mejor opción para usted si supera su presupuesto. Considere qué tipos de formularios y funciones necesitará realmente. Escriba una lista de formularios y características imprescindibles. Es posible que descubra que un paquete de software básico se adapta a sus necesidades.

Aquí hay otros puntos a considerar al elegir un software de preparación de impuestos:

¿Preferiría tener una versión de escritorio dedicada para trabajar o es importante poder trabajar desde un servicio en la nube? Considere cuánto viaja y trabaja mientras viaja. ¿Es importante para usted tener declaraciones estatales incluidas en su paquete de software? Si es así, observe detenidamente cada plan porque algunos cobran más por los formularios estatales.
¿Tiene conocimientos de tecnología o necesitará bastante soporte para utilizar el software? El soporte por chat es la forma más conveniente de comunicarse con el servicio de atención al cliente, pero no todos los paquetes incluyen soporte por chat. Haz tu investigación.

Con leyes tributarias y plazos de presentación en constante cambio, un profesional de impuestos debe tener un software rápido pero eficiente que incluya todos los formularios y funciones de presentación necesarios. Pero el precio también importa. En última instancia, el mejor software fiscal es aquel que satisface todas sus necesidades y le ayuda a mantener el aspecto más crucial del trabajo: la satisfacción del cliente.