Al elegir una impresora 3D, un buen punto de partida es comprender el material que desea utilizar para crear objetos. En su forma más básica, tendrás que elegir entre producir objetos de plástico o de metal. La fabricación 3D de objetos totalmente metálicos le situará en una categoría de alto coste y reducirá considerablemente sus opciones.
El plástico abre amplias opciones. Hay filamentos de plástico que incrustan motas metálicas o fibras de madera, lo que permite imprimir en 3D objetos que tienen características metálicas o de madera pero que siguen siendo fundamentalmente de plástico. Los objetos metálicos pueden oxidarse, brillar o ser lo suficientemente ferrosos como para atraer un imán. Los objetos de madera pueden soportar tintes y acabados de madera.
Casi todas las impresoras de filamentos FDM (modelado por deposición fundida) que hemos propuesto anteriormente imprimirán una amplia variedad de filamentos de plástico. Además de la fibra de madera y los filamentos metálicos, puedes imprimir fibra de carbono, nailon, plástico ABS, plásticos flexibles y más.
En términos generales, cuanto más exótico sea el filamento, más caliente deberá calentarse el extremo caliente (la parte que derrite el plástico). Mire las especificaciones de materiales de los filamentos que desee y compárelas con las temperaturas máximas de los extremos calientes. Generalmente, si una impresora dice que admite varios tipos de filamentos, estás bien. Si una impresora solo admite PLA o no tiene una base calefactable, estás limitado a un plástico más simple.
Las impresoras de filamentos tienen una variedad de características clave que querrás considerar. Las camas calentadas permiten una mejor adherencia de los objetos durante la impresión, pero las camas calentadas grandes en las impresoras de marco abierto disiparán el calor en los bordes, lo que reducirá la confiabilidad de esas impresiones.
Algunas impresoras de filamento tienen alineación automática, que establece la distancia entre la cama y el cabezal de impresión. Personalmente, odio alinear las impresoras a mano, por eso siempre busco la función de alineación automática. Suele estar disponible en las impresoras más caras, pero merece la pena.
Algunas impresoras de filamentos admiten varios filamentos. Esto puede resultar útil tanto para imprimir varios colores como para mezclar tipos de filamentos, como imprimir una bisagra flexible entre dos elementos rígidos de plástico duro o imprimir soportes en un filamento soluble, lo que facilita la creación de un objeto terminado. Incluso destacamos una impresora de filamento que viene con un cartucho de tinta CMYK y rocía tinta en cada capa para impartir todo color.
Si desea crear objetos muy detallados para miniaturas o joyas, querrá buscar una impresora de resina. Estos utilizan resina plástica ligera para endurecer en capas delgadas. Son desordenados, pero sus detalles suelen ser insuperables.